Descubrimos cinco joyas que visitar en la península más auténtica de República Dominicana.
Disfrutar de unas vacaciones en Samaná es de lo más parecido a viajar al paraíso. ¿Qué tiene esta península de la República Dominicana que la hace única? Hoy repasamos algunos de sus tesoros en nuestros #MiércolesViajeros.
Vacaciones en Samaná: un paraíso natural en República Dominicana
Es inevitable pensar en República Dominicana y que a la mente llegue la imagen de un resort. Sin embargo, Samaná demuestra que es posible disfrutar de un ‘todo incluido’ más allá de lo típico y lo tópico.
La provincia de Samaná es la península con más personalidad caribeña de República Dominicana. Empezó a conocerse internacionalmente por el influjo de los viajeros independientes, amantes de los viajes de naturaleza y de experiencias con un plus aventurero.
¿Hoteles? Sí, claro. ¿Comodidad y confort? Máximos. Pero, al mismo tiempo, respeto con el entorno e integración plena en el medio ambiente y el bellísimo paisaje de la zona. ¿Resultado? Samaná conserva su personalidad y su esencia, de manera que el viajero puede disfrutar de la vida rural y vivir experiencias auténticas con la población local.
Cinco joyas que visitar en Samaná
Unas buenas vacaciones en Samaná no deben prescindir del disfrute de cinco grandes joyas de la región.
En primer lugar encontramos el Parque Nacional de los Haitises, una gran extensión de territorio casi virgen en la que destaca la bahía de San Lorenzo, uno de los pocos santuarios de ballenas jorobadas del mundo.
Manglares, selva tropical, cuevas e islotes kársticos conforman un paisaje de ensueño que puede visitarse en barco desde la marina de Samaná. Una de las paradas de esta excursión será Cayo Levantado, una pequeña isla conocida por ser uno de los rincones más románticos de Samaná.
El Salto del Limón es otro de los tesoros de Samaná. Se encuentra en el interior y allí se multiplican las fotos de un verdadero espectáculo: el agua cayendo desde unos 50 metros de altura a una piscina natural donde es posible disfrutar de un maravilloso baño. La excursión puede hacerse a pie, a caballo o en mula.
En este top 5 de experiencias en Samaná no faltan los paseos por los pueblecitos de pescadores. Las Galeras o Las Terrenas son sólo dos referencias para disfrutar del sabor auténtico del pescado recién capturado después de deleitarse con un paseo por playas de arena fina o incluso una sesión de snorkel bajo las aguas cristalinas. Y, entre las playas más destacadas, ¿cómo olvidar Playa Rincón? Se trata de uno de los arenales más famosos de todo el Caribe, donde la vista se pierde entre el azul del mar y los exuberantes cocoteros.
El color no falta en Samaná. Y su máximo exponente lo encontramos en la capital de la provincia, Santa Bárbara de Samaná, una ciudad tranquila y pintoresca con casas vistosamente decoradas. El verdadero símbolo del lugar es la Churcha, una iglesia construida por afroamericanos en el siglo XVIII.
Y, si al principio hablábamos de las ballenas jorobadas que acuden a la bahía de San Lorenzo a tener a sus crías, culminamos las cinco grandes experiencias de Samaná con una visita al Museo de las Ballenas, que promueve la preservación de la especie y del ecosistema marino.
República Dominicana, un paraíso de vacaciones
Samaná es sólo una de las numerosas localizaciones de película que podremos disfrutar en República Dominicana.
Vivir experiencias únicas en Punta Cana es una opción perfecta para todo tipo de viajeros, con lugares como la preciosa Playa Bávaro, una de las más elegantes. La mayoría de los resorts que se sitúan aquí tienen su propio tramo de playa en frente de las instalaciones hoteleras, lo que garantiza privacidad y comodidad para el descanso.
Situado en la costa sur de la isla, al este de La Romana y tocando con el Parque Nacional del Este, se encuentra otro de los lugares más paradisíacos de todo el planeta: Bayahíbe. Esta exclusiva región evolucionó en la década de los 90 de un pequeño pueblo de pescadores a uno de los lugares más solicitados a la hora de planear unas vacaciones caribeñas.
Una experiencia dominicana no sería completa sin conocer Santo Domingo, la capital del país y una de las más antiguas ciudades coloniales de América. La belleza de su pasado colonial puede observarse en el centro histórico de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, donde destacan construcciones como la catedral de Santo Domingo, la primera catedral y el Alcázar de Colón, el primer castillo de América. Una experiencia que nos abocará directos al pasado y que le dará a nuestras vacaciones el toque urbano perfecto para complementarlo con el dolce far niente practicado en la costa caribeña de la República Dominicana.
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